miércoles, 27 de junio de 2007

El rollo de ser una muñeca bien provista

Por Elvia Lafinur

Los tratados epistemológicos que hemos podido consultar en este laborioso lustro de recolección de datos e investigación en la materia, nos permiten un acercamiento multifuncional al rollo de estar bien provista. Una aproximación primera sugiere, en efecto, que las mujeres son, a juicio de los hombres, y desde el primer día, unas hembras típicas, locas, y colmadas de unos atributos que "todas tienen" y de los que de a poco, e individualmente, deben despojarse para agradar o, al menos, diferenciarse del resto de su especie.
Esta hipótesis, confirmada en numerosos estudios de campo, daría por tierra la aspiración de cualquier ser humano, incluida la hembra (o especialmente la hembra), de presentarse ante sus semejantes como un ser único, con cualidades y defectos propios, algunos similares, muchos de ellos irrepetibles y diferentes de los de los demás seres del universo.
Así, de entre todas las muñecas que han sufrido las elucubraciones persecutorias de sus machos, los ensayos clínicos sugieren que las que más secuelas presentan son las denominadas "bien provistas". Hasta hoy no ha podido comprobarse científicamente la relación existente entre el prejuicio machista y la noción de tener unas buenas tetas. Dos términos que, como verá el lector, podrían ser constitutivos del rollo de base.

No hay comentarios: