la escafandra de mocos te impide oler la nueva ciudad de madrugada. tampoco degustás los sobacos del avión transoceánico, eso sí que es de agradecer. continente otro, calor otro, ojeras de panda del invierno porteño, estornudo del tierral cordobés. nada bueno puede pasar esta maldita noche después de varias otras sin dormir. residente, sí, pase. pasaporte azul en mano, azul de policía federal argentina. y al chico sin pasaporte bordó se le escapa el último metro. confesión en la cola del taxi. hay que huir del aeropuerto, entonces huimos juntos. "si me pillo ese resfrío argentino, me acordaré de ti". hay vida después del aeropuerto. quizá hasta te cures de las demás maldiciones que rezaban: "si me contagiás esa gripe, te mato".
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3 comentarios:
por fin alguien que sube un BUEN ROLLO.
El rollo de contagiarse es peligroso. Quién no lo tiene?
yo me contagio
me aprhendo a cosas
desarticulo cuando veo una infección más interasantes que las q tengo
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