martes, 11 de septiembre de 2007

El rollo de reírse "jeje"*

* Por lolaenrollo.

Nuestra querida amiga lolaenrollo nos envía su primer rollo que sé, será del placer de todos los rolleros, empezando por quien presenta.
Bienvenida lolaenrollo, y por muchos rollos más....

Juro que no fue de golpe.
No desperté un día con el sentimiento de odio carcomiéndome el estómago.
Tampoco ocurrió mientras me lavaba los dientes, o cuando hacía la fila para rapipago.
¡No!, mi odio comenzó a gestarse poco a poco.

Puedo decir que primero, antes del odio, hubo un sentimiento dulce, de ternura, que luego se convertiría en esta cosa negra que me acosa.

Empezó frente al monitor de mi computadora.

A ver, vivo pegada a mi máquina.
Es mi centro de trabajo, creación, estudios, investigación y socialización. Teclea, teclea, cursor, teclea.
Y, acompañándolo todo, en estado omnipresente, el messenger.
Entrevistas, reportajes, investigaciones, negocios, proyectos. Saludos, chismes, discusiones. Todo, a través de las múltiples ventanitas con iconos, sonidos, colores, fotos y nicks informativos, a veces hasta poéticos, que se abren en mi pantalla. Felicidad pura: yo, comunicada a casi cualquier hora.
Me gustaría aclarar, antes de continuar, que los picos dramáticos de mi historia de animadversión, ocurrieron siempre, y ocurren, justo en medio de una conversación que parece pintar agradable. En ello también encuentro una buena razón para mi rencor. [No, no es rencor. Es odio].
Sí, así fue como un día él apareció. Y no deja de hacerlo. Ese es el caso. Cuando casi comienzo a confiar en alguien, llega él y se apodera de mi messenger. Con distinta tipografía, color, con animaciones o sin ellas.
Como dije, antes, cuando alguien lo invocaba, puedo asegurar que sentía hasta compasión.
Sí, mi rollo fue primero compasión: “Che, pobre, mirá cómo lo escribe” (traducción argentina para: “pana, pobrecito, mira cómo lo escribe), pensaba.
Pero poco a poco, comencé a descubrir las personalidades que él encubría.
Sicopatías, mentiras, intereses malsanos, envidia, cobardía, egolatría. Todo se revela con él. El mundo entero: amigos, enemigos, empleadores, clientes, colegas, todos se desnudan cuando él aparece en un cuadrito del msn. Es la materialización, escrita, del mal. Por eso comencé a odiarlo.
Tanto que tuve que ir a terapia.
Mi psicoanalista me dijo: “Mirá, lo podés tomar de otra manera. Hasta le podés sacar provecho a tu descubrimiento”. Así es mi terapeuta: me suelta, a veces, algo, pero la solución, y así lo dejaba en claro una vez más, debía encontrarla yo. Ujum, aprendí a transformar mi odio en una herramienta útil.
Los criminales en potencia, los verdaderos culpables, los maridos cornudos, las amigas envidiosas, las mentiras de hijos adolescentes, los futuros noviazgos problemáticos. Los candidatos peligrosos, los fascistas enmascarados, las falsas izquierdas, los profesores truchos (denotación argentina para el “chimbo” venezolano), los malversadores de fondos públicos.
Todos y todo puede ser descubierto si, a través del messenger, él aparece. Lo que a continuación sigue, es el mecanismo que creé a partir del rollo, el que me permite usar mi odio como método de indagación.

Guía para descubrir personalidades a través del msn

Paso 1: Es condición sine qua non, disponer de una computadora que tenga instalada el programa messenger (preferiblemente la última versión, ya que el proceso de indagación se ve optimizado si pueden aparecer iconos animados).
Nota: Puede hacerlo desde un cibercafé o locutorio .
Paso 2: Establezca una conversación, del tipo que sea, en forma amena con alguien que le despierte dudas. Incluso, también con aquellas personas en las que cree confiar.

Paso 3: Dígale algo hilarante. Si no tiene don de comediante, no se preocupe. Navegue por Internet y busque el último discurso de cualquier candidato a cualquier presidencia, intendencia, o similar (ya sabe, ése, el de las promesas de cambio). Básese en algún punto (la reducción de la pobreza y la inclusión de los marginados suelen ser puntos imbatibles), y coménteselo a la persona con la que chatea.

Paso 3: Discrimine su risa. Guíese por la siguiente tabla (no importan la cantidad de carcajadas, ni el icono que las sustituya, aunque mientras más llamativo el icono, más revelará la personalidad):
A.- Se ríe “jaja…” Esta persona es normal. Puede confiar en ella. (“Jaja”: cagarse de risa hasta morir).
B.- Se ríe “jiji…” Esta persona fue adicta a los dibujos animados. Confíe en ella. (“Jiji”: chistosa. Se siente “creativa”).
C.- Se ríe “jojo”. Aunque de personalidad dudosa [Nadie le explicó que el barrigón de la barba no es el que gasta la pasta en los regalos de navidad], aún puede confiar en ella. Quizás sea un poco tonta. (“Jojo”: inocentona)
D.-
Se ríe “juju”. Puede tratarse de dos casos: O, está usted delante de una persona un poco tarada, o, esa persona se siente incomprendida por la sociedad. (“Juju”: lenta, sin duda).

E.- Pero, si esa persona se ríe “jeje”, sepa usted que ha aparecido el símbolo inequívoco del mal, germen de mi odio más profundo. No cabe duda: el “jeje” demuestra que el peligro está delante de sus ojos. Desconfíe completamente.

Si fuere el caso, denuncie a esta persona.
Seguro se trata de ese “conocido” que, en una fiesta íntima en su casa, le hurtó aquel dinero, reloj o abrigo que nunca encontró.
O, fue quien lo dejó con el culo al aire en aquella reunión. Quien difundió esa información que para usted era privada. Esta persona siente profunda envidia por su talento, trabajo, vida familiar o afectiva. Aunque parece a primera vista que emplea el asqueroso “jeje” para significar una inocente risa, no confíe. Ese “jeje” esconde a alguien que sólo desea parecerse a usted, que puede fácilmente convertirse en su agresor. Que sueña cada noche con quitarle aquella cuenta de trabajo que tanto tiempo y esfuerzo le costó. No lo dude, por favor, huya para siempre o manténgala al margen de sus asuntos íntimos. Aunque, también puede aprovechar esta información que se desvela ante sus ojos, para quitarse enemigos del camino.

En todo caso, NUNCA CONFÍE EN ALGUIEN QUE EN EL MESSENGER SE RÍE “JEJE”.

Además, ¿quién, que no sienta amor por lo oscuro, por lo más bajo, puede reírse “jeje”?

Odio la risa “jeje”.

13 comentarios:

Eugenia dijo...

querida lola. no sabe qué feliz me ha hecho su rollo, porque era un rollo muy mío. completamente de acuerdo con su teoría del jeje, totalmente de acuerdo. también me alegró el hecho e que soy normal, según sus clasificaciones, y que a lo sumo, puedo haber visto muchos dibujos animados en la infancia pero soy una persona creativa! jijij
un abrazo, buen rollo!

Mildred Plotka dijo...

habría que adaptar el post a las diferentes nacionalidades. saben que en eeuu (son medio infras, si) se ríen hahahahahahahaa en arabia babababababa en china xixixixixix y los anarcos, como no podia ser de otra manera, como me río yo
kakakakakakaaaka

lady rolliza dijo...

me en-can-tó!
pero no me río...por las dudas :))

Anónimo dijo...

Coincido plenamente. En el verano salí con un chico y cometi el error de leer sus mensajitos de texto del celular. Allì, entre otras cosas, leí un mensaje de una chica que decia: 'hola,pudiste arrancar hoy? yo no.. despues de lo de anoche parezco un teletuby con dolor de panza, jeje..´
Se imaginan? Quede indignada logicamente. Pero sobre todo el recuerdo del jeje es lo que peor me pone.Por eso, estoy totalmente de acuerdo con el post, una fundamentalista casi del post. Que bueno resulta leer algo que refleja el propio pensar.Aparece una cuota de narcisismo mas que interesante. Gracias. Saludos . Missis Rollal.
(Nota: me parece que Ud tiene una buena terapeuta.)

Eugenia dijo...

Saludos. Ceciccc anonimo, qué bueno lo del rollo compartido del jeje
jaja

Cloe dijo...

claro, Missis Royal... es exactamente eso: el "je" o "jeje" tiene/n una carga de complicidad, de boca torcida, de sonrisa pilla que usted captó en ese sms y que se adivina en el chateo. Claro, cunado el "je" está dirigido a uno, todo bien (porque se supone que ambos compartimos el motivo de la risita de lado) pero como usted lo narra.... buhhhhhhhh
De todos modos, mal por leer mensajitos ajenos o la factura del teléfono ídem (esas dudas y/o certezas puestas en cifras y letras sólo nos cagan la vida PROPIA, je je buahhhhh)
abrazos

Anónimo dijo...

Sí Cloe, como Edipo REy cuando dijo: maldigo mis ojos por haber visto aquello que jamas hubieran debido ver.( y se arranca los ojos)
Es el costo de la verdad.Me parece que la verdad se encara como Edipo,o tambien con u n jej je que usted muy bien dice aca, resume digamos , con la palabra complicidad. Bien, SAludos!!! Missis Rollal

Cloe dijo...

uy uy uy con la bola del ojo arrancada!
a mí me parece que esta polémica siguen en el siguiente post de Rolo... o es pura coincidencia?

Anónimo dijo...

buenísimo el dibujo me causa gracia jjajaj todos sabemos quien es jajaja buenisimo te felichito missrollo besos

El Cupo Masculino dijo...

No me rompan la bola del Ojo, que se van a lastimar con los espejitos.

Anónimo dijo...

jajajajajjaj

Anónimo dijo...

haaaaa que divinas las lamparas del ojo, que lindo, digamos, las luces del ojo.Las bolas del ojo.. no me acuerdo si hay.pero bueno, No, no rompamos. por las dudas.SAludos! Missis Rollal

A dijo...

jajajaj yo tambien odio a los que se rìen con jeje